martes, 31 de mayo de 2016

Visita de Monseñor Obispo Mariano José Parra Sandoval


Tuvimos la dicha de tener la visita del
Monseñor Mariano J. Parra S., 
Obispo de Ciudad Guayana...
 Nuestros corazones estuvieron llenos de mucha alegría, todos con un mismo sentir, una misma esperanza...
Nos sentimos muy honrados con su presencia, 
 agradecemos a Dios que Usted haya tenido la oportunidad de poder venir a nuestro colegio a Bendecirnos..
"Nuestra tarea es sumar buenas voluntades, esfuerzos comunes, deseos trascendentes para que las semillas del Evangelio den muchos frutos.
 Nuestra tarea es sumar y Dios multiplicara. 
Nosotros sumamos, Dios multiplicará nuestras humildes sumas con el poder de su gracia."
































 






Muchas Gracias por su Visita..


Advocación de la Virgen la Milagrosa 1º "A"

La Virgen de la Medalla Milagrosa
El 27 de noviembre de 1830 la Virgen Santísima se apareció a Santa Catalina Labouré, humilde religiosa vicentina, y se le apareció de esta manera: La Virgen venía vestida de blanco. Junto a Ella había un globo luciente sobre el cual estaba la cruz. Nuestra Señora abrió sus manos y de sus dedos fulgentes salieron rayos luminosos que descendieron hacia la tierra. 

María Santísima dijo entonces a Sor Catalina:

"Este globo que has visto es el mundo entero donde viven mis hijos. Estos rayos luminosos son las gracias y bendiciones que yo expando sobre todos aquellos que me invocan como Madre. Me siento tan contenta al poder ayudar a los hijos que me imploran protección. ¡Pero hay tantos que no me invocan jamás! Y muchos de estos rayos preciosos quedan perdidos, porque pocas veces me rezan".

Entonces alrededor de la cabeza de la Virgen se formó un círculo o una aureola con estas palabras: "Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a Ti". Y una voz dijo a Catalina: "Hay que hacer una medalla semejante a esto que estas viendo. Todas las personas que la lleven, sentirán la protección de la Virgen", y apareció una M, sobre la M una cruz, y debajo los corazones de Jesús y María. Es lo que hoy está en la Medalla Milagrosa.

El Arzobispo de París permitió fabricar la medalla tal cual había aparecido en la visión, y al poco tiempo empezaron los milagros. (lo que consigue favores de Dios no es la medalla, que es un metal muerto, sino nuestra fe y la demostración de cariño que le hacemos a la Virgen Santa, llevando su sagrada imagen).
Luisiana Rivero